El uso de internet, uno de los mayores generadores de emisiones de carbono

Cuando pensamos en la huella de carbono que generamos con nuestras actividades diarias, asociamos el uso de vehículos o de aparatos electrónicos conectados a la nube, lo que desconocemos es que el uso de internet también produce emisiones de CO2.

Vivir en un mundo conectado donde el acceso a la información es casi inmediato y los tiempos de espera son cada vez menores, tiene sus ventajas; sin embargo, hay un gran impacto que para muchos no es evidente: el uso excesivo de energía generado por el tráfico de datos que, en consecuencia, produce emisiones de CO2.

Cuando nos hablan de emisiones de gases efecto invernadero es normal que pensemos en las emisiones que producen los carros, las industrias o incluso los residuos pero difícilmente relacionamos la emisión de CO2 con el consumo de datos. Acciones como ver una serie en Netflix, navegar en redes sociales o incluso abrir una nueva página web en el explorador, también contaminan. Todas estas actividades emiten dióxido de carbonodebido a que los dispositivos necesitan energía para su funcionamiento.

Pero la contaminación de la industria del internet no se limita a la emisión de gases, se extiende al gasto de agua y materiales provenientes de la extracción de recursos naturales necesarios para su sostenimiento. Son necesarios 3 mil 400 km2 y 2.6 billones de litros al año, para la construcción y mantenimiento de los centros de datos y las redes de transmisión. Sumado a esto, hay emisiones derivadas de los procesos de producción: para fabricar un ordenador se necesita tres veces su peso en combustibles fósiles, por cada gramo de un microchip se utilizan 360 gramos de combustibles fósiles y 750 gramos de productos químicos. 

La ONG Greenpeace afirmó en 2011: “si la nube fuera un país, sería el 6º consumidor de energía del planeta”. Una posición que ya fue superada dado que la popularización del acceso a internet ha incrementado en gran medida con los dispositivos móviles en los últimos años. El mundo de las TIC estaría consumiendo actualmente alrededor de 8% de toda la energía mundial.

Según un estudio del portal TollTester, que revisó más de 200 páginas entre los sitios web más visitados del mundo,  plataformas de video como YouTube o Netflix, redes sociales como Twitter o comercios virtuales como Amazon, figuran entre los sitios de internet que más contaminan.

La buena noticia es que hay empresas que están tomando acciones para alimentar internet con energías renovables. Apple es la compañía líder en el uso del internet verde, manteniendo su premisa de un 100% de renovables en la nube, consigna seguida por Yahoo, Facebook y Google con el 73%, 49% y 46% de energía limpia respectivamente. Y aunque se estén tomando acciones frente a esta problemática, todavía hay un gran camino por recorrer desde las empresas y desde nosotros como individuos, por eso es nuestra responsabilidad hacer un uso eficiente del internet y los recursos a los que tenemos acceso.

¿Qué hacer para reducir nuestro impacto?

Aunque resolver el problema de la huella de carbono en el uso de internet no es una tarea sencilla debido a que la industria, el comercio, el ocio y las relaciones, se basan cada vez más en el mundo digital, sí podemos aportar nuestro grano de arena para reducir su impacto:

Celulares

• Evita la adquisición innecesaria de nuevos modelos, esto produce residuos innecesarios y excesivos

• Borra frecuentemente los datos de tu navegador web

• Haz uso de la función de optimizar uso de energía de tu celular

• Cierra las aplicaciones que no estés utilizando

Redes sociales

• Descarga videos en lugar de ver su transmisión online

• A la hora de escuchar música, también es preferible descargar el contenido

• Intenta reproducir los vídeos en baja definición en lugar de en 4K u 8K

• Cuando sea posible, evita el uso de red 4G ya que consume 23 veces más energía que la red Wi-Fi

• Haz video llamadas con la cámara apagada

Correo electrónico

• Cancela las suscripciones que no lees

• Responde correos solo si es necesario

• Clasifica tus correos para que sea más fácil encontrarlos

• Gestiona los correos al abrirlos: ¡responde, reenvíalos, muévelos o elimínalos, ¡no los acumules!

• Reducir el tamaño de los documentos que envías por correo electrónico para disminuir el peso del mensaje

Otras acciones que suman                                                

Más allá del uso de internet, hay hábitos cotidianos que nos llevan a malgastar la electricidad en los hogares o lugares de trabajo, estos son conocidos como vampiros energéticos. Si logramos detectarlos y neutralizarlos, podemos generar un impacto muy positivo en la disminución de nuestra huella de carbono.

¿Cuáles son los vampiros energéticos?                    

Un computador apagado y conectado puede consumir 2.1 KWh por mes.

Un televisor apagado y conectado puede consumir 2.2 KWh por mes.

Un horno microondas conectado puede consumir 2.2 KWh por mes.

El aire acondicionado apagado y conectado puede consumir 0.7 KWh por mes.

Un cargador de celular conectado al tomacorriente puede consumir 0.7 KWh por mes.

Ya lo sabes, si no estás utilizando alguno de los aparatos electrónicos que tienes en tu casa u oficina, ¡desenchúfalos! Esta pequeña acción tendrá un gran impacto para el planeta.

Conoce más sobre los vampiros energéticos

¿Sabes qué son las etiquetas energéticas y como estas te ayudarán a hacer compras más responsables?

Conversatorio- Huella digital asociada al consumo energético

Conoce algunas iniciativas de trabajadores de algunas zonas del país:


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