¿Se pueden aprovechar las aguas lluvias?
Durante los últimos años, debido al crecimiento de la población mundial y a la necesidad de producir mayor cantidad de bienes y servicios, la demanda de agua está en aumento. Sin embargo, el cambio climático ha provocado sequías e impactos drásticos en los ecosistemas que suponen desafíos a la supervivencia de las especies.
Aprovechar las aguas lluvias se ha convertido entonces en una alternativa bastante necesaria para reducir la explotación del recurso natural y cambiar las dinámicas de consumo. Para que esto sea posible, a continuación, te contamos más sobre este fenómeno atmosférico y en qué consiste un sistema para su captación.
¿Qué son las aguas lluvias?

Cualquier tipo de agua que cae desde las nubes sobre la superficie de la tierra recibe el nombre de aguas lluvias. Y es el resultado de la condensación del vapor de agua contenido en las nubes.
Según la Organización Meteorológica Mundial, la lluvia es la precipitación de partículas líquidas de agua, de diámetro mayor de 0,5 mm o de gotas menores, pero muy dispersas. Si no alcanza la superficie terrestre no sería lluvia, sino virga, y, si el diámetro es menor, sería llovizna. La lluvia se mide en milímetros por metro cuadrado.
Para su formación intervienen tres factores: la presión atmosférica, la temperatura y, especialmente, la humedad atmosférica. Por lo que puede originarse en diferentes tipos de nubes, generalmente nimboestratos (nubes oscuras, su base suele estar en torno a los 2000 metros) y cumulonimbos (compuestas por aire cálido y húmedo, suelen producir precipitaciones intensas y tormentas eléctricas), así como en diferentes sistemas organizados de células convectivas; la persistencia de una lluvia abundante requiere que las capas de nubes se renueven continuamente por un movimiento de ascenso de las más inferiores que las sitúe en condiciones propicias para que se produzca la lluvia.
Las diferentes formas de precipitación incluyen llovizna, lluvia, nieve, granizo, agua nieve, y lluvia congelada.
Tipos de lluvia
Lluvia convectiva: suele producirse en zonas llanas o con pequeñas irregularidades topográficas. Al calentarse las capas bajas que están en contacto con la superficie terrestre, el aire se hace más ligero, se expande, pesa menos y sube. Cuando sube se enfría, se condensa y produce la precipitación.
Lluvia orográfica: se efectúa por el ascenso del aire húmedo al encontrarse con un obstáculo orográfico, como una montaña.
Lluvias frontales o ciclonales: se producen cuando dos masas de aire de características diferentes se ponen en contacto y el desplazamiento de una provoca la ascensión frontal de la otra.
Sistemas de captación de aguas lluvias
Los sistemas de captación de aguas lluvias (SCALL) se han utilizado tradicionalmente a través de la historia de las civilizaciones, pero hasta hace unos años no era común el uso de este tipo de tecnología. Diferentes iniciativas y algunas ONG, han atendido con éxito poblaciones en situación de extrema pobreza gracias a su utilización, por lo que actualmente se está popularizando en países cómo China, India, Tailandia, Japón, Bangladesh, EEUU, Brasil, Islas Vírgenes, Islas Turcas y Caicos, México, entre otros.
Como representan una opción sencilla, económica y ecológica para abastecer en cantidad y calidad a las poblaciones, se pueden construir de manera casera. Con un poco de curiosidad y juicio, los SCALL pueden funcionar tanto para uso doméstico como para el consumo humano, pero esto último dependerá de la integración de un mecanismo que le permita potabilizar el agua.
Estos sistemas también disminuyen el impacto por crecientes, debido a que el agua de tormentas extremas se almacena, evitando en muchas ocasiones, inundaciones. Además, se utilizan en la producción de comida en granjas urbanas, ambientes controlados y agricultura sujeta a las temporadas de lluvia, lo que permite resolver los problemas de agua que sufren las comunidades rurales.
Son una de las mejores alternativas para generar un gran impacto social, económico y ambiental; a través de la creación de proyectos productivos altamente rentables y competitivos.